Comenzamos el dia con un desayuno opíraro en el Hotel.
Entramos al Parque Nacional Iguazú, que fue creado en el año 1934, y que cuenta con un total de 55.500 has. entre Parque y Reserva.
El parque lleva el nombre del río que le sirve de límite norte y que en idioma guaraní significa "agua grande", el que seguramente fue denominado así por el enorme caudal que desbarranca en la zona, 1750 m³ por segundo.
Dentro del parque vimos las majestuosas "Cataratas del Iguazú", son impresionantes con sus más de 275 saltos, los que oscilan entre 30 y 80 metros de altura.
El ruido producido por la Garganta del Diablo y el vapor que se levanta en su caída forma con la luz del sol enormes arco iris son difíciles de olvidar.
Tambien son espectaculares las otras cascadas, al atardecer los vencejos se arrojan en picado para atrapar insectos.
Tambien son espectaculares las otras cascadas, al atardecer los vencejos se arrojan en picado para atrapar insectos.
Desde abajo se visitan también los saltos entre begonias, orquídeas, helechos y palmeras con tucanes, papagayos y vencejos y montones de mariposas de fuerte colorido.
Para llegar a las cataratas has de subir a un trenecito que te acerca hasta ellas, te advierten de que tengas mucho cuidado con unos "ladronzuelos de comida", son los coatís, una verdadera plaga en el parque ya que al no ser autóctonos de allí no tienen depredadores y son una plaga.
Toni tenia una servilleta de papel sucia (con olor a bocata) en el bolsillo y un coatí le metio la mano quitándole la servilleta y el ticket del tren , finalmente depués de una persecución el ladronzuelo lo soltó. Estos bichos no nos tienen ningún miedo y si te muerden puedes coger la rabia.
Desde el lado argentino hay mas selva |
Toni tenia una servilleta de papel sucia (con olor a bocata) en el bolsillo y un coatí le metio la mano quitándole la servilleta y el ticket del tren , finalmente depués de una persecución el ladronzuelo lo soltó. Estos bichos no nos tienen ningún miedo y si te muerden puedes coger la rabia.
Una vez en las cataratas vas andando por un montón de pasarelas. Las hay en 3 niveles distintos, caminando desde la Estación hasta la Garganta del Diablo hay mas o menos 2,5 km. de distancia.
El paseo hasta llegar a las cataratas es muy bonito y una vez llegas allí ya es fantástico.
En este lado hay mas cascadas pero las ves desde arriba, la vista es mejor desde el lado brasileño.
A punto de un refrescante bañito dentro de una catarata |
El paseo hasta llegar a las cataratas es muy bonito y una vez llegas allí ya es fantástico.
En este lado hay mas cascadas pero las ves desde arriba, la vista es mejor desde el lado brasileño.
Cuando llegas a la Garganta del Diablo esta tan llego que casi tienes que pelearte con la gente para poder tomar una foto desde la barandilla. Hay tanto vapor de agua que te quedas mojadísimo. Has de guardar el movil para que no se estropee.
Otra vez nos montamos en el tren para salir de allí, comimos rápidamente en un restaurante de comida rapida (2 platos combinados y bebidas: 850 pesos) porqué por la tarde teníamos una mega aventura.
Primero fuimos en un vehiculo de safari, en el trayecto por el parque vimos vencejos, tucanes, papagayos y mariposas. Estuvo muy bien el trayecto.
Después de bajar andando 300 escalones llegamos al embarcadero de las zodiac para navegar por el rio Iguazú y acercarnos a las cataratas.
En la lancha acercandonos a las cataratas |
¡No teníamos ni idea de lo que nos esperaba! Te dicen que no hace falta que te pongas el chubasquero, que no sirve de nada, te dan una bolsa impermeable para poner tus cosillas y te dicen que si quieres descalzarte guardes allí los zapatos. Y tu piensas que para unas cuantas salpicaduras de agua no hace falta tanta precaución, pues SI que hace falta, porqué te meten directamente debajo de las cataratas.
Es una experiencia única, la fuerza del agua es bestial, no puedes ni abrir los ojos con el chorrón de agua que te cae encima, literalmente te mojas hasta las bragas. Y así entre risas y gritos nos "ducharon" vestidos unas 4 o 5 veces.
Es una experiencia única, la fuerza del agua es bestial, no puedes ni abrir los ojos con el chorrón de agua que te cae encima, literalmente te mojas hasta las bragas. Y así entre risas y gritos nos "ducharon" vestidos unas 4 o 5 veces.
Asi de mojados terminamos el paseito en lancha |
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